Están jugando con la desorientación, con la incertidumbre, hasta con el miedo de tanta gente que lleva tanto tiempo pasándolo mal y que no quieren renunciar a soñar con un milagro.

Estos trileros de la derecha están aprovechando el agobio de tantos pacientes y esperanzados ciudadanos que, aún con el agua al cuello, se resisten a creer que esto no pueda tener solución. Se proponen rematar la estafa que hace 4 años originaron los mercaderes desaprensivos, los avaros depredadores que han dejado todo como un erial.

Ahora, desde las mismísimas instituciones, nos quieren hacer comulgar con ruedas de molino erigiéndose en salvadores de nuestras vidas y haciendas. Se han instalado en el poder, han llegado como un elefante a una cacharrería y esa estética tiene anestesiados a quienes se resisten a admitir que están siendo estafados.

Pero jugar con los sueños del débil, con la esperanza de los que se resisten a admitir la debacle no acaba siendo suficiente cuando esas "moscas cojoneras" conocidas como sindicatos dejan en evidencia el juego sucio de la derecha política y empresarial y le descubren las cartas que esciondían celosamente en la manga. O en la sotana.

Bancos, especuladores e inversores desvergonzados varios nos dejaron con lo puesto, y el gobierno ahora les encubre sus fechorías y nos carga  a los paganos más indefensos con el mochuelo de redimir las secuelas de un desastre en el que solo no tuvimos nada que ver sino que, como se está demostrando, fuimos y seremos los más perjudicados.

Y cuando decidimos que ya está bien, vamos y damos un puñetazo en la mesa y convocamos huelga general se dan por ofendidos y declaran abierta la veda del juego sucio más rastrero. Unos se ponen de los nervios, otros insultan en la primera página de sus medios respectivos y otros, las propias empresas, presionan descaradamente para conseguir que los trabajadores no secunden la huelga.

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Amenazas, chantajes, advertencias en clave paternalista o, directamente, presiones muy complicadas de resistir para quien tiene miedo, inseguridad o hambre directamente.

Los piquetes empresariales despliegan estos días sus artes más rastreras.

Los piquetes empresariales no están dispuestos a que los trabajadores luchemos por nuestros derechos.

Los piquetes empresariales no dudan en recurrir a cualquier argumento para intimidar a sus empleados.

Los piquetes empresariales se toman como una cuestión de honor conseguir que la huelga no triunfe.

Los piquetes empresariales son violentos, desprejuiciados, contundentes y despiadados.

Los piquetes empresariales siempre han existido pero ahora, con la reforma Laboral, se sienten aún más respaldados en sus desmanes.

Por eso lo denunciamos

Por eso queremos que lo denuncies tú si eres víctima de la presión de tu emprersario, del jefe de personal o del mamporrero al que le hayan encargado ese trabajo sucio.

En la página web de UGT Andalucía nos estamos haciendo eco de empresas que presionan, amenazan y coaccionan a sus trabajadores para que no vayan a la huelga.

Eso puedes hacer tú si quieres. Si eres víctima de un piquete empresarial, ayúdanos a denunciarlo y desenmascararlo que, como no puede ser de otra manera, respetaremos la confidencialidad.

Hay que contrarrestar la presión de los piquetes empresariales  y para esto todo esfuerzo es poco.

La huelga, además de ser un derecho que debemos poder ejercer todos en libertad es en este caso, cuando se trata de evitar que prospere la Reforma Laboral, una obligación para todo el que sabe lo que nos ha costado lo que tenemos y lo que podemos perder tanto nosotros como nuestros hijos y nuestros nietos si dejamos que continúen actuando con la impunidad con la que, nos consta, lo están haciendo.

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Fuente:  Blog de Manuel Pastrana