El movimiento católico-monárquico-ppsoe-empresarial español ocupando gobierno y lo que ellos denominan "oposición", protege al defensor a ultranza de las matanzas de toros que se salta, en esa misma línea la protección mundial de especies en extinción como el elefante. De la inteligencia del elefante se ha dicho mucho, la de quien los mata está puesta en cuestión.

Mensaje de los pueblos del estado español al tirador: No nos crea tan ignorantes, sabemos que el capital no tiene patria. Un capitalista ha propuesto que los parados vendan su sangre, para que lo que saquen, sumado a lo que cobran del paro (si cobran), les permita disponer de algo más de dinero.

El único valor del capitalismo es el dinero. 60 euros por chupada de sangre a la semana. El dráculo capitalista que ha propuesto sacar la sangre a los parados se llama Victor Grifols, el asunto es que su empresa farmacéutica, "Grifols", que cotiza en el Ibex y en Nasdak, es importadora de hemoderivados , que se obtienen de la sangre, y chupando la sangre aquí se ahorraría y haría crecer su capital mundial. Lo ha propuesto en "la escuela de negocios Esade", lugar desde el que se proyectan regularmente ataques contra la clase trabajadora. Como ahora la venta de sangre es ilegal en el estado español, en poco tiempo el movimiento católico-monárquico-ppsoe-empresarial va a legalizarla, (recuerden lo de los contratos basura: "más vale trabajar un mes aunque se gane la mitad que no trabajar"), pues la sanidad la van a privatizar en lo esencial, y la sangre será objeto de negocio en los hospitales, con el chupasangre Grifols a la cabeza.

Nos van desangrando. Que un sanguinario asesine a un elefante por capricho es delito en este mundo, menos en Botsuana, donde aterrizan los capitalistas cuyo único valor es el dinero. La monarquía, una especie en extinción (hay 20 en todo el mundo), mata, con la protección del movimiento que la protege.

En las tiendas de chinos venden elefantes de papel y globos con el dibujo de un elefante, en el elefante de papel caven varias personas; me voy a comprar un elefante. Hay que quitarles los rifles a los sanguinarios, e impedir al chupoptero Grifols que se aproveche de los trabajadores en paro.