El modelo epañol para la exportación PDF Imprimir E-mail
Opinión / Actualidad - Política
Escrito por Arturo del Villar / UCR   
Jueves, 03 de Marzo de 2011 05:47

   Zapatero con el primer ministro tunecino Beji Caid Sebsi El presidente del Gobierno y secretario generalísimo del partido impropiamente denominado Socialista se ha ido a Túnez, según sus declaraciones, para exponer a sus dirigentes el modelo español de transición de una dictadura a la democracia. Nada más anunciar su visita dimitieron el jefe del Gobierno y cinco ministros tunecinos. La fama de gafe del compañero Rodríguez le precede.

 

   ¿Qué modelo quiere exportar? En Túnez el dictador Ben Alí estuvo 23 años en el poder, hasta que una revolución popular le obligó a exiliarse el 14 de enero pasado. En España el dictadorísimo se mantuvo en el poder 36 años y ocho meses, sin contar los dos años y ocho meses de la guerra, y se murió de viejo después de designar a su sucesor, sin consultar la voluntad del pueblo, algo que nunca le preocupó.

   El sucesor designado por él lleva 35 años en el poder, en una dilatada transición hacia la vuelta a la legalidad constitucional cercenada por la sublevación militar. Todos los colaboradores del dictadorísimo continuaron en sus puestos, porque no se juzgó a nadie por los crímenes cometidos. Todavía algunos supervivientes ocupan cargos oficiales, como el antiguo ministro fascista Fraga, a quien acaba de rendirse un homenaje en el Congreso de los Diputados.

    Este modelo es el que quiere exportar a Túnez el compañero Rodríguez. Los españoles preferimos que importe a España el modelo tunecino, verdaderamente democrático y rápido. Pesan demasiado 35 años de transición.

   Otro modelo que el compañero Rodríguez pretende exportar al mundo es el del Ejército español, compuesto por hispanoamericanos y africanos, como la Legión Extranjera, porque los jóvenes españoles desconfían de su Ejército, al haber oído contar historias de la dictadura militar. Los militares españoles van destinados a cumplir misiones en países subdesarrollados, para instruir a sus fuerzas armadas.

   Pero resulta que el 24 de febrero murieron cinco militares y tres más quedaron heridos en la Academia de Hoyo de Manzanares (Madrid), al intentar desactivar unos explosivos. Y tres días después unos cacos entraron en la Base General Menacho de la Brigada Mecanizada en Badajoz, en un todoterreno militar, y robaron todas las armas que quisieron, y no dinamitaron el cuartel porque no les dio la gana.

   Otro modelo exportable es el de la independencia del reino de España, como nación soberana. Pero el 1 de marzo la ministra de Asuntos Exteriores ha declarado que todas las bases militares españolas están a disposición de los Estados Unidos, si se deciden a invadir a Libia. Actitud típica de colonia ante el Imperio, nada imitable.

   Y es de suponer que el compañero Rodríguez no pretenda exportar el modelo económico español, porque acaba de regresar de un viaje de pedigüeño por países vecinos de Túnez, para ver si puede dar de comer a los cerca de cinco millones de desempleados del reino. Más le valdría no hacer de viajante de comercio, y procurar que los demás países ignoren los modelos españoles, para no avergonzarnos más de lo que ya estamos.