Entrevista a Julio Anguita. "El 15-M puede ser el hervor que le falta a la izquierda" PDF Imprimir E-mail
Opinión / Actualidad - Entrevistas
Escrito por Ángel Munárriz / Público   
Martes, 14 de Junio de 2011 00:00

Julio Anguita en su casaJulio Anguita, excoordinador general de IU. Aconseja concreción y sentido táctico a los indignados   

 Voz de prestigio de la izquierda española, Julio Anguita (Fuengirola, Málaga, 1941) mantiene encendido el piloto rojo de militante de IU. Acaba de pedir la dimisión de las direcciones local y provincial de la coalición en Córdoba, donde fue alcalde, tras el batacazo del 22-M; participa en el crítico debate sobre el posible pacto postelectoral en Extremadura, inclinándose por facilitar el Gobierno, a cambio de medidas concretas sobre programa, a quien a su juicio 'está' en la derecha (PSOE) y no a quien 'es' la derecha (PP); se reúne con interlocutores del 15-M en su ciudad para aportar ideas... 'El Califa' es un político jubilado que jamás dejará la política. Esta entrevista fue realizada antes de la constitución de los ayuntamientos.

 

¿Cómo explica el hundimiento de Izquierda Unida en Córdoba?

Viene de la época anterior [con Rosa Aguilar, exalcaldesa con IU, hoy ministra con el PSOE], de un populismo buenista, de sumarse a eventos patrióticos, de decir que sí a todo el mundo, de cordobesismo fácil... Las listas se pensaban para captar votos, no para el proyecto. Todo ese buenismo quiebra cuando ella se va. El buenismo químicamente puro de Rafael Gómez [alias Sandokán, imputado en el caso Malaya, cuyo partido es segunda fuerza política tras el PP] se encuentra el campo abonado. No vale culpar al tsunami del PP o al castigo al PSOE.

 ¿Hay margen para recuperarse?

Todo. Pero maticemos. Hemos perdido una batalla, no la guerra. Empieza otra y necesitamos otra estrategia, otros objetivos, otras direcciones.

¿Por qué sube tan poco IU el 22-M en toda España?

Lo lógico habría sido que el desastre del PSOE nos beneficiara. Pero no ha sido así. Lo que no podemos es ir diciendo que PP y PSOE están en la misma orilla y ahora pactar con el argumento de que, si no se pacta, viene la derecha. La diferencia entre discurso y práctica es tremenda. Confiar la estrategia a que pierda otro la mayoría para vender caro mi apoyo es un error.

¿Esa es la estrategia de IU?

Lo parece. Y no hablo de España, sino de determinados territorios.

¿Andalucía?

Determinados territorios.

¿Comparte la línea actual de IU?

Conozco la honradez de Cayo Lara, su voluntad de asumir su papel. El problema es que en la organización no hay un discurso, sino varios. Y múltiples prácticas contrapuestas, contradictorias y opuestas por el vértice.

¿No hay rumbo?

Diríamos que es el multirrumbo. Hay claras inconsecuencias. ¿Cómo podemos seguir formando alianzas con Iniciativa Per Catalunya cuando una y otra vez los diputados que salen elegidos con nuestro apoyo se van a otros grupos? Es algo insólito.

¿Es buena idea consultar a las bases en Extremadura?

Extraordinaria, pero todo referéndum tiene que ser vinculante. Lo han hecho así por miedo a las presiones.

¿Pedro Escobar, de Extremadura, le ha pedido su opinión?

Y yo se la he dado. Mi opinión es que hay que preguntar: "A cambio de nuestro apoyo, ¿qué medidas?". ¡No qué puestos! A mis compañeros de Extremadura no les importa un puñetero puesto. Luego le doy a usted [Guillermo Fernández Vara] mi apoyo en la investidura e inmediatamente paso a la oposición. Y ahora negociamos cada ley, cada medida. Y si hay un caso de corrupción apoyo con los otros una moción de censura.

¿Exige alguna responsabilidad en la dirección federal por el 22-M?

Ya hace tres años presenté un documento, La refundación de IU, que planteaba la renovación escalonada de la dirección. Fue aceptado. Y ahí se ha quedado. Yo he hecho mis aportaciones a la refundación. Luego se nombró un responsable [Enrique Santiago] que elaboró un documento interesante. El problema es que se ha quedado en el papel. No se ha hecho.

¿Esperaba el derrumbe del PSOE?

Se veía venir. El drama es a quién han utilizado para castigar al PSOE [al PP]. Pero como decía Espartero: "Hágase la voluntad nacional". Aunque vaya voluntad nacional (se ríe).

La gente ha castigado los recortes y el Gobierno los justifica en que no había alternativa. ¿Qué opina?

Si un partido que se llama socialista dice eso, que cierre el chiringuito. Lo increíble es que [los de IU] somos los únicos que torpemente aún decimos que son de izquierdas.

¿Falta un proyecto europeo para que la alternativa económica de izquierdas sea creíble?

Hay que empezar por algún sitio, no podemos esperar a eso. Es cierto que eso hace falta, pero no podemos quedarnos esperando el milagro de Pentecostés. Lo primero es movilizar a la gente por causas inmediatas: salario mínimo de mil euros netos al mes, el 72% de la media de los seis países europeos que lo tienen más alto; ninguna pensión por debajo de este salario; progresividad en la reforma fiscal; persecución a muerte del fraude fiscal y de la economía sumergida; banca pública; lucha contra los paraísos fiscales... Dirá que son duras. Pero son totalmente constitucionales, no estoy pidiendo echarse al monte. Sé que no es fácil, que es arriesgado, pero así es la lucha. Lo que planteo es romper la baraja, romper el modelo. Eso sí, con la gente en la calle. Si no, imposible.

¿Cómo debe IU acercarse al 15-M?

Sin imponer, pero sin disfrazarnos. No somos apolíticos, somos comunistas. Respetamos el movimiento, pero tenemos derecho a que se debatan nuestras propuestas. Debemos decir: 'Algunos de los puntos que ustedes defienden no son nuevos, los defendió IU en el Congreso hace trece años". No para dar lecciones, sino para aportar. Como militantes tenemos la obligación de estar en esa movida. El autor de la frase "somos apartidistas, no apolíticos" es un genio. Dio en la tecla. Hay un error en la Constitución al plantear que los canales de participación son los partidos. El ciudadano ha sido apartado y se ha caído en la partitocracia.

Y los partidos funcionan con escasa democracia interna...

Pero cuidado. Se suele acusar a los aparatos de imponer cuando a ningún militante se lo manipula si no está dispuesto a decir "beeeee". No se puede presionar a quien no se deja.

A su juicio, ¿Carme Chacón en el PSOE se ha dejado presionar?

Da la impresión. Pero ha sido la militancia asustada la que ha dicho: "Yo no quiero líos, resolvedlo por arriba". Eso es dejación de su libertad.

¿Falta liderazgo en el 15-M?

Habría que distinguir entre los indignados, Democracia Real Ya y otros movimientos. Lo que yo creo es que si el proyecto es estar permanentemente en las plazas, sucumbirá. ¿Cuáles son las salidas? Los programas. Sentadas, manifestaciones, visitas a fuerzas políticas con reclamaciones concretas. Deben ser menos genéricos. La izquierda ahora mismo está bullendo en muchos sitios, pero falta el gran hervor. Este 15-M, si va a lo concreto, puede ser el gran hervor.

¿Erró IU al presentar a Antonio Rodrigo Torrijos, imputado en el 'caso Mercasevilla'?

Desde mi convicción de su inocencia, IU no puede hacer documentos para incumplirlos. Hay una cosa en política que se llama seriedad.

¿A qué reflexión le mueve el 'Diccionario Biográfico Español'?

Hay historiadores de estampilla, que lo son porque alguien les pone un sello, nada más. Don Luis Suárez [autor de la hagiográfica entrada de Franco] es uno de ellos, y no el único. Hay falsificaciones que son una indignidad, una felonía.