Arabia Saudí es una de las dictaduras más despóticas del mundo árabe, regida por las leyes islámicas y con prácticamente nulas libertades civiles y políticas. Allí "ofender" al islam puede estar castigado con la muerte y las mujeres no tienen derecho a hacer casi nada sin la autorización del marido. Como potencia petrolera, es uno de los eternos e inquebrantables aliados de Estados Unidos y los grandes medios de comunicación callaron cuando sus tropas invadieron Bahrein para reprimir las protestas.