“Los revolucionarios no puede prescindir ni de la insurrección –como hipótesis extraordinaria de antagonismo y de ruptura–, ni de la batalla hegemónica que se libra cotidianamente en las trincheras de la resistencia”
A 100 años de la revolución bolchevique, muchas son las cuestiones que afloran del pasado e interrogan nuestro presente.
Una de ellas, posiblemente la que más inquietó a los revolucionarios del siglo XX y que sigue rondando entre nosotros, es la cuestión de la insurrección como acontecimiento revolucionario y como condición para el desencadenamiento de un proceso de transformación radical.