Carta de Michael Moore
Michael Moore
Ecupress 17
de noviembre de 2009
Quisiera decirles algunas palabras a aquellos que se
asumen cristianos (los musulmanes, judíos, budistas,
etc., también pueden leer lo que voy a escribir
estoy seguro, de que también ellos podrán aplicarlo
a sus propios valores espirituales).
En mi último film hablo por primera vez sobre mis
propias creencias en una película. Siempre creí que
las preferencias religiosas son profundamente
personales y que deben ser mantenidas en la
privacidad. Después de todo hemos escuchado
demasiado en las tres últimas décadas sobre como uno
debería comportarse y debo decir que estoy bastante
quemado de piedades y de lugares comunes
considerando que somos una nación violenta que
invade otros países y nos castiga por tener la
audacia de afrontar tiempos difíciles.
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Estoy igualmente en contra de cualquier tipo de
proselitismo. No pretendo ciertamente que nadie
adhiera a mi fe. Como católico, tengo también mucho
que decir sobre la Iglesia como institución, pero lo
dejaré para otro día (o para otra película).
A todos los tipos perversos de Wall Street y a los
corruptos miembros del Congreso a que me refiero en
“Capitalismo. Una historia de amor”, les planteo en
la película una sola pregunta: “¿Es un pecado el
capitalismo?” y sigo preguntando “¿Habría sido Jesús
capitalista?, “¿Habría pertenecido a un Fondo
buitre? ¿Podemos aprobar un sistema que permite que
el 1% más rico pueda financiar su salud mientras que
el 95% de la población no puede?
Estoy inclinado a creer que no es ningún hallazgo
creer que el capitalismo se opone a todo lo que
Jesús (y Moisés y Mahoma y Buda) predicó. Todas las
grandes religiones tienen clara una cosa: es
perverso apropiarse de la mayor parte de la torta y
dejar a los demás pelearse por el resto. Jesús dijo
que a los ricos les será muy difícil entrar en el
cielo. Nos enseñó que debemos cuidar a nuestros
hermanos y a nuestras hermanas y que la riqueza debe
ser compartida. Dijo también que si no le das abrigo
a los sin techo y no alimentas al hambriento, te
será muy difícil encontrar el código que te permita
abrir las puertas celestiales.
Sospecho que para nosotros los usamericanos hay
malas noticias.Sabemos que ahora tenemos la más alta
tasa de desempleo desde 1983. Se cierra un puesto de
trabajo cada 7,6 segundos, todos los días 14 mil
personas pierden su seguro de salud. Es así como
entendemos el “benditos sean los pobres”
Al mismo tiempo los banqueros de Wall Street
(“Bendita sea la Riqueza”) acumulan más y más bienes
– y se esmeran en pagar cada vez menos impuestos (en
el último año el promedio de impuestos de Goldman
Sachs fue de apenas un 1%) ¿Hubiera aprobado esto
Jesús? Si no ¿porqué dejamos que siga este maldito
sistema? No me parece que usted pueda ser al mismo
tiempo Capitalista Y Cristiano – porque usted no
puede amar el dinero Y amar a su vecino cuando usted
le está negando a su vecino la posibilidad de
concurrir al médico solo porque usted puede tener
algo más que lo esencial. Eso es “inmoral” y usted
está cometiendo un pecado cuando obtiene beneficios
a expensas de los demás.
Cuando usted esté en la Iglesia esta mañana piense
por favor en todo esto. Quiero pedirle que les
permita acercarse a sus “mejores ángeles” Y si usted
está entre los millones de usamericanos que están
luchando semana a semana, sepa que yo he prometido
hacer todo lo posible para detener este mal – y
espero que usted se una a mí hasta que no haya un
solo ser humano que no pueda sentarse a la mesa.
Gracias por escucharme. Estaré en misa dentro de un
rato. Le preguntaré al sacerdote si el cree que
Jesús habría especulado con hipotecas y sus
derivados. Creo que él debe haber sido bueno en
matemáticas, sino ¿cómo hubiera podido multiplicar y
repartir los panes y los cinco pescados entre 5 mil
personas?
O él fue el primer socialista o sus discípulos no
fueron eficientes. O ambas cosas.
Michael Moore
es un cineasta documentalista usamericano que denuncia a través de sus filmes la
violencia que genera la tenencia de armas (Bowling
for Columbine), las falencias de los seguros de
salud (Sicko) y desnuda en esta última película
(Capitalismo. Una historia de amor) el drama
capitalista, siempre en el marco de su propio país.
Traducción: Susana Merino - ECUPRES
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