Derrotar al Partido Popular significará avanzar en la Democracia, en las Libertades y, por consiguiente, en la República.
Unidad
Cívica por la República, consecuente con los compromisos adquiridos desde
nuestra constitución como organización republicana, de extender los principios
y valores republicanos y, asimismo, trabajar por instaurar la democracia y la
III República en nuestro país, ante la convocatoria de Elecciones Generales
prevista para el próximo 14 de Marzo, quiere haceros llegar la
siguiente declaración.
Estamos
convencidos que la III
República llegará más pronto que tarde, no sólo por razón democrática
y porque se evidencia en el día a día que el sentir y el movimiento
republicano avanza en los
ciudadanos y en la sociedad, sino también porque el marco constitucional borbónico,
heredado del franquismo y veinticinco años después de su instauración, cada día
que pasa, con el concurso de las nefandas políticas que con especial virulencia
viene practicando el Partido Popular, degradan aún más un sistema que muestra
ya hoy signos de un agotamiento
galopante.
Ni
que decir tiene que si los fundamentos políticos, económicos y sociales de carácter
progresista que pudieron sustentar a la borbónica constitución del 78 ya,
durante los sucesivos gobiernos de Felipe González fueron vaciándose de
contenido, tras ocho años de mayoría del Partido Popular, el panorama es aún
más desolador. Sin más, hoy son papel mojado y, sin rubor, son sistemáticamente
conculcados.
Si
el Estado de las Autonomías hace
aguas por los cuatro costados de nuestra geografía y se reclaman mayores
competencias y soberanía para las mismas, el gobierno Aznar, mediante la
utilización bastarda y partidista del terrorismo etarra, trata de
retrotraernos a un centralismo patriotero y decimonónico. Mientras, con
posiciones maniqueas y autoritarias, los populares ningunean al Parlamento
dictando leyes en beneficio de sus objetivos políticos, al igual que utilizan
los Servicios de Información del Estado para espiar a partidos democráticos,
en tanto la Soberanía Nacional y el Ejército, se ponen al servicio de los
EE.UU, conduciéndonos, con falsedades, a una guerra de ocupación, inmoral e
ilegal contra Iraq que ha ocasionado ya miles de víctimas. Igualmente, la
Justicia y el Poder Judicial son mediatizados, la Fiscalía General del Estado se pone a las
órdenes del gobierno y, consecuentemente, la Separación de Poderes es una mera
ficción. Asimismo, se avanza en la confesionalidad del Estado introduciendo, a
machamartillo, la asignatura de la religión en la Escuela Pública, mientras
las Libertades son, arbitraria y sistemáticamente recortadas. No menos lo son
los Derechos Sociales, cuyo retroceso es patente en la Salud, Vivienda, Enseñanza,
Protección Social, Emigración y Empleo con sus altas cuotas de precariedad y
siniestralidad, en tanto la riqueza nacional, en contra del precepto
constitucional, sigue supeditada a las oligarquías de siempre, a los grupos
empresariales afines al poder gubernamental y al capital financiero,
especulativo y monopolista que impone el Imperio con la globalización
económica. Y todo ello, con el aderezo de una boda real en ciernes, con
fastos a cargo del erario público, con el sostén de una Cultura Basura que
cotidianamente enajena, nos ofende e invade, mediante el control y la utilización
partidista de los medios públicos de información, que en el caso de la
televisión pública, su manipulación, llega ya a límites insospechados.
Consecuentemente,
es urgente que los republicanos del Estado Español demos una respuesta a estas
políticas arbitrarias, prepotentes e insolidarias del Partido Popular; de
involución en la Democracia y las Libertades y de retroceso en las conquistas
sociales. Respuesta que pasa por participar, masivamente, el 14 de Marzo votando
a las fuerzas políticas del Estado que por su convicción republicana y por su
historia, representan los valores del acervo político y cultural del
republicanismo español y en tanto sus programas contengan propuestas y
alternativas concretas de progreso en cuanto a Libertades, Derechos Humanos,
Cultura de Paz, Justicia, Separación de Poderes, Federalidad, Laicismo, Valores
Cívicos, Ética Política, Derechos Sociales y Servicios Públicos, destacando
entre estos últimos, la Salud y la Enseñanza.
Estamos
convencidos que la República no nos será regalada, habrá que conquistarla y,
consecuentemente, habrá que rendir, previamente, las rancias políticas que ha
impuesto el Partido Popular y eso se conseguirá participando todos los
republicanos en el proceso electoral que se avecina, pero, al tiempo, es
perentorio que nosotros, los republicanos del Estado Español, para alcanzar
nuestro propósito, la ruptura democrática previa a la III República, es
necesario que nos impliquemos en un proceso de creación de redes ciudadanas
que, organizadamente, vayan impregnando en la sociedad la cultura y los valores
republicanos y que, a su vez, influyan en las fuerzas políticas y sociales con
el objeto de propiciar un nuevo proceso constituyente y el advenimiento de la
III República. Nuestra razón por la República y la pasión por la libertad
política colectiva sólo podrán conseguirse y expandirse si somos capaces de
llevar a efecto estas premisas.
No
obstante, aquellas fuerzas políticas que por su historia se arrogan principios
y valores republicanos, pero en la práctica cotidiana, acatan la monarquía y
su sistema constitucional, deben ser conscientes que, sin el concurso de cientos
de miles de republicanos que nunca han votado porque ni aceptaron ni aceptan la
borbónica constitución, difícilmente será posible derrotar al Partido
Popular, sus artes y sus políticas. En este sentido, demandamos a las fuerzas
políticas de progreso, herederas de los valores de Libertad, Igualdad y
Fraternidad que emanaron de la I y II Repúblicas, su acercamiento al
republicanismo militante, rompiendo las viejas ataduras con una monarquía ilegítima,
impuesta por el dictador y con una constitución que, veinticinco años después
de su promulgación, no satisfacen los anhelos de Libertad, Justicia y
Solidaridad que reclaman la ciudadanía y los Pueblos que conforman el Estado
Español. Demandas que, estimamos, sólo podrán ser satisfechas en el marco del
Estado Federal, Solidario, Laico y Republicano.
¡Viva
el 14 de Abril! ¡Viva la III República!
Unidad Cívica por la República, Madrid, Marzo de 2004