Restauración
monárquica y republicanismo español
Nunca se
olviden...
Pablo González
Velasco *
Nunca se
olviden, ciudadanos, que la monarquía no es un árbitro neutral, tiene sus
intereses particulares. No lo duden, si al rey le dieran a elegir entre una
monarquía absolutista o una república democrática, optaría por la primera.
El objetivo es mantener la estabilidad de esta institución de origen feudal y
de legitimación hereditaria. Si el rey fuera demócrata, entendería que la
fuente de legitimación de un jefe de Estado debe ser a través de la elección
directa del pueblo. Que conste que nadie le niega el derecho a presentarse a
unas elecciones como Presidente de la República.
Nunca se olviden, juancarlistas, que el rey no está sujeto, por ley, a
responsabilidad, y que su origen es netamente ilegítimo. Según Julio Anguita
"La Dictadura liberticida de Franco hizo aprobar en 1947, tras Referéndum,
la ley de Sucesión que hacía de España un Reino sin monarca y un Jefe de
Estado vitalicio con la facultad de designar a su sucesor a título de Rey. En
1966, también con Referéndum, se aprobó la Ley Orgánica del Estado que
ratificaba los extremos anteriores. El 22 de Julio de 1969 y ante las Cortes
españolas el entonces Príncipe juraba fidelidad a Franco, a las leyes del régimen
y aceptaba ser el sucesor. En Noviembre de 1975, tras la muerte del dictador,
Juan Carlos I era proclamado Rey de la monarquía franquista". No es menos
sorprendente las manifestaciones del actual monarca sobre su identificación y
justificación del franquismo (régimen que exterminó a varias generaciones de
demócratas españoles) "No consiento que se hable mal de Franco en mi
presencia". "Tengo una profunda estima por el General Franco, un
gran reconocimiento por lo que ha hecho por mi país, pero estoy de acuerdo en
reconocer que en el momento actual representa un obstáculo para un acercamiento
de España a los otros estados de Europa occidental" (Otoño, 1972).
Nunca se olviden, ciudadanos, del papel histórico de la monarquía española.
Representa el cáncer genético de España: el nacionalcatolicismo (militarismo
imperial, monopolismo cultural y poder eclesiástico). Sobre casos de corrupción:
http://www.rebelion.org/spain/031105rey.htm.
La biografía no autorizada: http://www.jcasturias.org/descargas/Textos_Varios/sverlo.pdf.
Costes de la boda (+ de 4 millones de ?): http://www.nodo50.org/unidadcivicaporlarepublica/documunntosrep/se%20estima%20gasto%20boda.htm
Nunca se olviden, militantes de la izquierda oficial, que sus partidos y
sindicatos en 1977-78, fueron utilizados tanto por elementos exógenos y endógenos
para cumplir el papel de estabilizador de la monarquía constitucional,
desmovilizando a todo el movimiento obrero y aceptando el pacto de silencio, lo
que suponía abandono del ideario y la memoria histórica republicana, y la no
depuración de responsabilidades de las autoridades del régimen franquista,
cosa que se está haciendo en Argentina. El juez Joaquín Navarro se pregunta:
"¿Por qué se da la legitimidad a la legalidad franquista? ¿Por qué y
para qué se aceptó sin apenas condiciones la mutilada reforma que ofrecieron
los herederos del general? Se aceptó, sin previo debate ni referéndum la forma
monárquica del Estado. Se claudicó ante el botín constitucional que exigían
las Fuerzas Armadas y la Iglesia Católica."
Nunca se olviden, juancarlistas, de la trampa del referéndum constitucional de
1978, que prefiere: fascismo o monarquía constitucional burguesa. Entonces
existía una correlación de debilidades, entre fuerzas políticas, muy
determinada por un contexto de miedo ante el ruido de sables (golpe de Estado).
Nunca se olviden, ciudadanos, del papel del Departamento de Estado (EE.UU): en
la creación de UCD (derecha liberal-democristiana- proamericana) y su papel de
asesor directo de Juan Carlos.
Nunca se olviden, militantes psocialistas, que los millones de marcos alemanes
que entraban en las cuentas del PSOE, no surgían de una solidaridad
internacionalista, sino llevaban contrapartidas. Entre ellas: Maastricht, OTAN,
anticomunismo,... En el magistral y desvelador libro "Soberanos e
Intervenidos", del que fuera asesor de Allende, Joan Garcés, dice:
"En mayo de 1979, vigente ya la Constitución de 1978, celebradas dos
elecciones parlamentarias y una municipal en régimen de pluralidad de partidos,
Felipe González Márquez abría su informe escrito en el Congreso de su
organización afirmando, categórico, que la democracia era una realidad
consolidada en España, y recababa su parte de mérito en ello. Cuando horas
después la mayoría de los mil delegados votaron una moción discrepante con su
línea política, González se negó a formar una Comisión Ejecutiva que
respondiera a la resolución congresual. El alcalde de Madrid -Enrique Tierno
Galván- subió a la tribuna a explicar que los delegados debían renunciar a
darse una dirección no aprobada por González pues, de otro modo, "mañana
mismo los alemanes cortan la financiación al partido, en unos días más los
tanques ocupan las calles de Madrid". Los congresistas regresaron a sus
casas sin elegir a una dirección. Pero, acto seguido, el equipo de González
suprimió los controles democráticos internos y se garantizó en su partido,
durante tres lustros, sufragios de apoyo del 100% -la corrupción reemplazaba a
la ideología".
Nunca se olviden, trabajadores, que la burguesía española (la derecha) nunca
fue republicana por su debilidad histórica y su miedo a las izquierdas. El
republicanismo español representaba la superación de las políticas
conservadoras. Así se demostró en 1931, cuando se produjo la única ruptura
democrática en la Historia de España, y así se ratificó, cuando los poderes
reaccionarios (Iglesia, oligarquía militar, burguesía terrateniente e
industrial) vieron que aquella democracia burguesa se les había escapado de las
manos. La Alemania Nazi y la Italia de Mussolini apoyaron militarmente al bando
fascista. EE.UU a través de sus empresas proporcionaban petróleo para mover
los tanques franquistas. Inglaterra se apresuró en reconocer el gobierno de
Franco, y Francia con un "socialista" de presidente, se lavó las
manos. Sólo Méjico y la Unión Soviética defendieron a la República tanto en
la ONU como en el suministro de armamento, alimentos y consejeros militares.
Tras tres años de cruenta guerra no sólo civil, sino de defensa de la
legitimidad democrática ante el fascismo, y de liberación de clase
(revolucionaria), se asesinó a la República.
Nunca se olviden, ciudadanos, de los miles de luchadores antifranquistas
(comunistas, anarquistas, republicanos, maquis [guerrilleros de los años 40 y
50],...) que sufrieron la muerte, la tortura y la cárcel por la libertad. Toda
nuestra gratitud y recuerdo, es lo mínimo que podemos hacer por ellos. Un
reconocimiento histórico al PCE es necesario, fue la única fuerza plantó cara
a Franco, tanto en la vertebración del ejercito popular en la defensa del
Estado Republicano como en la desestabilización del régimen franquista. El
"Foro por la Memoria" es una organización que recopila memoria histórica
y le da un sentido político: http://www.pce.es/foroporlamemoria
Nunca se olviden, constitucionalistas y trabajadores, que la constitución,
se incumple; es papel mojado. Lo poco que había de Estado social se va
desmantelando a medida que se va imponiendo el Estado liberal. Los derechos en
materia laboral, vivienda, información,... son formales. Otros artículos están
llenos de pobredumbre democrática, y han resultado ser, un mecanismo de
consolidación de las clases dominantes (ley electoral bipartidista, no separación
de poderes públicos, enquistamiento de conservadurismo clasista en los
tribunales, senado acomodado a la derecha española, esterilidad jurídica en el
control parlamentario al gobierno, la nueva ley de partidos,...), en definitiva,
constitución del 78 y su red jurídica estructural es un instrumento de las
clases dominantes y un obstáculo para profundizar en la libertad política.
Nunca se olviden, españolistas, que España es históricamente una nación
fracasada. Sólo en tiempos republicanos, la conciencia nacional española fue
atractiva. Una explicación a ese fracaso nacional puede ser que España no fue
un país colonial, ni tuvo una burguesía nacional fuerte, tanto por la
pervivencia del conservadurismo absolutista como por las contradicciones de
clase (burguesía nacionalista española, catalana y vasca, principalmente). A
diferencia de Francia, que homogeneizó eficazmente su territorio (imperialismo
cultural), llegando a un consenso identitario entorno a una lengua, un Estado y
los valores burgueses; aquí en España se pudieron conservar culturas, aún con
represión, de los diferentes pueblos y pueblos-nación del Estado español. Lo
cual, esto último, es positivo. El actual marco constitucional no reconoce
verdaderamente a España como un Estado plurinacional y plurilingüistico, ya
que sólo reconoce a la nación española y los estatutos están en un hilo jurídico
(leyes orgánicas). O España se organiza desde la multiculturalidad y el
federalismo (con autodeterminación) o España nunca podrá constituirse como
espacio de convivencia integrador de pueblos del estado español, y seguirá
siendo un lugar incomodo, injusto y cada vez menos atractivo.
Nunca se olviden, republicanos y trabajadores, de los valores que subyacen en la
reivindicación de la República: Ética civil, internacionalismo, justicia
social, identidad española multicultural, libertad de expresión y asociación,
laicidad, participación, separación de poderes, federalismo, libertad política,
apoyo público a la cultura y la educación para el desarrollo de todos los
ciudadan@s por igual,... Según Rafael Torres: "Los valores republicanos,
pues, no nacen de l o que establecen dogmáticamente coranes o biblias ni
siquiera de lo que establecieron los grandes padres del republicanismo, sino de
la convicción moral y de la coordinación impecable entre lo que se dice y se
hace".
Nunca se olviden, independentistas, que existe una tercera vía. Carod-Rovira, líder
de Esquerra Republicana, dice que "es más utópica una España federal que
una Catalunya independiente". Creo que tiene razón, pero también creo
que, actualmente, me parece más interesante la alianza de pueblos del Estado
Español, compartiendo un Estado republicano multinacional, desde la libre
adhesión, y volcarnos en la aventura de la construcción identitaria
multicultural española, como suma de identidades de los pueblos.
Nunca se olviden, castellanos, aunque oprimidos como todos los pueblos
trabajadores y campesinos, vuestra lengua fue manipulada y adueñada por un
Imperio. El perverso binomio castellano-español, es el núcleo del problema de
la diversidad cultural española. La Segunda República fue la época fértil
para las lenguas. El castellano llegó a su plenitud, se hablaba mejor que en la
actualidad. La producción literaria catalana fue prolífica. Por primera vez,
se publicó un diario íntegramente en euskara y tuvo espacios imprescindibles
para su supervivencia. Propongo la idea de un encuentro estatal y anual entorno
a la construcción de la identidad republicana.
Nunca se olviden, republicanos, que "Las Cortes Constituyentes de la II República
española (última legitimidad incuestionada e incuestionable) acordaron el 20
de Noviembre de 1931 declarar el decaimiento de todas las dignidades y títulos
de Alfonso XIII sin que pueda reivindicarlos jamás ni para él ni para sus
sucesores" Julio Anguita. Unidad Cívica por la República. http://www.nodo50.org/unidadcivicaporlarepublica
Nunca se olviden, ciudadanos, del baúl republicano, que fue cerrado a cal y
canto, en la transición. Este baúl encierra un enorme tesoro moral, político
y cultural. Es hora de abrirlo. Su llave es la organización de un movimiento
político, social y cultural que haga posible la ruptura democrática. Rafael
Torres opina que"la oferta moral del republicanismo español de izquierdas
se antoja más vigente y necesaria que nunca, si bien, para que ese mensaje
fraguara en la sociedad hasta pertenecer a ella, se necesitarían republicanos
capaces de sentir fervorosamente, como los de antaño, esa idea, y, desde luego,
dignos de promoverla y divulgarla". En eso estamos.
* Pablo González Velasco es estudiante de economía y militante de IU y PCE.
comunistarecalcitrante@hotmail.com