La Monarquía y otras instituciones inútiles

  Javier-Fernando Hernández Sánchez

UCR 9 de Octubre de 2007

 Verdaderamente empieza a ser preocupante la época por la que atraviesa la monarquía Borbónica, si para defender su causa no encuentra personas de  más entidad progresista que el anciano periodísta Sr. Ansón. Se presentó este señor el otro día, en un programa tildado de telebasura y emitido por un canal que la vox populi bautiza como el genuino de la telebasura galopante; todo el mundo sabe (excepto sus lectores) que el Sr. Ansón dirige el periódico más irracional que haya existido jamás en este país (y ya es decir). Este buen señor, cruelmente envejecido por los años, empleando unos argumentos cuarteados por el uso y unos sofismas siempre utilizados por los absolutistas desde el siglo XIX, que por cierto son de una simpleza exacerbada, nos vino a decir que :aunque la monarquía Borbónica nos cueste los dos ojos de la cara a los españoles: sus cientos de empleados (mayordomos, criados, jardineros, chóferes, guardaespaldas, secretarios, militares ad hoc, etc, etc) sus palacios, para el enorme número de príncipes y demás, bueno pues y a pesar de eso, claro que "eso" no lo decía, lo ocultaba, el amigo Ansón, fiel a su pensamiento medieval, carlista en el XIX, franquista en el XX y Borbónico en el XXI, siempre lo más reaccionario que ofrece el menú, con un verbo coherente con la edad física y mental, afirmaba vehementemente que la monarquía Borbónica era una gozada o algo así. Argumentos serios, ninguno; descalificaciones serias y con rigor para las otras formas de Estado  no estaba capacitado para llevarlas a cabo , y sí algún intento penoso de franquistear el supuesto diálogo. Resumiendo: la monarquía Borbónica no ganó ni perdió nada con esta anacrónica comparecencia, creo ahora bien que, el canal de televisión emisor sí demuestra una vez más,  la poca seriedad de sus contenidos con la indigna parcialidad de sus invitaciones.
 
                     Este país gasta una barbaridad en instituciones inútiles y luego nos vienen  los políticos con que no hay dinero para llevar el AVE a esta ciudad o la autovia a esta otra; a esto se le llama desvergüenza. Tenemos los tres ejemplos que están en boca de todos: la monarquía Borbónica nos cuesta una enorme cantidad de miles de millones de euros y está en nuestras manos cambiarla con el simple consenso de los partidos mayoritarios. Si no lo hacen ya sabemos quiénes tienen la culpa. Somos el único país de la Unión Europea y mediterráneo que no tiene en la jefatura del estado a una república. Un presidente nos costaría el dos por ciento de lo que nos cuesta un rey.
 
                     El segundo ejemplo de lo que supone tirar el dinero del contribuyente es el Senado; Camara alta e inútil que únicamente sirve para que cobren un buen sueldo varios cientos de personas y se vayan a Madrid de juerga y luego a echarse la siesta a la cámara; es lamentable e ilustrativo de la escasa ética de los políticos de los partidos mayoritarios que así tienen a un montón de camaradas comiendo la sopa boba con cargo a los presupuestos generales del Estado.
 
                     Por último están las Diputaciones Provinciales; estas instituciones perdieron su razón de ser a partir del nacimiento de las comunidades autónomas que recogieron sus competencias. Los políticos con una golfería y escandaloso proceder tremebundos, las han mantenido ahí, ya que son por lo menos cincuenta en todo el país y recogen y dan sueldos a un auténtico montonazo de políticos de tercera división y regional. Tenemos, de verdad, gestionando nuestro dinero, el dinero público, a gente que en muchos casos son delincuentes comunes. Hoy en día, funcionando perfectamente las entidades autonómicas, el mantener las diputaciones provinciales es de juzgado de guardia porque todo el dinero que se gasta en ellas se está robando al contribuyente. 
                                

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