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No consiento que se hable mal de Franco en mi

 presencia. Juan  Carlos «El Rey»   


 

Jaume D'Urgell

G. Nagore

Noticias de Guipúzkoa 11 de septiembre de 2009

 

 

     "más allá de los símbolos o la pervivencia de reductos feudales del folclore institucional, la adopción de una forma de gobierno plenamente democrática, con una mayor separación de poderes, transparencia y participación, resultaría más favorable para los intereses del conjunto de la ciudadanía". No, al autor de estas palabras, pronunciadas ante su señoría, no le han dado ningún premio de civismo, sino que le van a meter 102 días al trullo por haber colocado una bandera española republicana en un edificio público en donde ondeaba una bandera española monárquica. Y recalco lo de bandera española republicana y bandera española monárquica porque a la prensa seria, independiente, objetiva y todas esas historias que solemos colocar los medios en nuestras cabeceras para tapar nuestras carencias ha repetido hasta la saciedad que lo han condenado por quitar la bandera constitucional, como si la tricolor no fuera una bandera constitucional y legítima, como si fuera un trapo de chichinabo

   Mejor no hablar de legitimidades. Jaume D'Urgell, madrileño nacido en Barcelona, puede pagar de sobra la multa y evitar la cárcel pero ha ido su señoría a dar con una de esas rara avis que prefiere vivir según sus argumentos que no estar siempre argumentando sobre cómo vive. Jaume ya ha declarado que no es para tanto lo de los 102 días porque "volveré a tiempo para ver por la tele el discurso del Rey". Jaume, ya trataremos de interferir las antenas porque los que hemos perdido la guerra nos tenemos que centrar en pequeñas batallas. Salud y República... constitucional

 

 

 

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