Diálogos.
César Alfonso
Viñas.
UCR
8 de Enero de 2009
Alumno: ¿Qué es la República?
Maestro: La República es la res pública, es decir, la cosa
pública, y el poder emana del pueblo.
Alumno: ¿Y una Democracia?
Maestro: La Democracia es el gobierno del pueblo.
Alumno: ¿España es una democracia?
Maestro: España no es una democracia, ya que el rey está por
encima de la Ley máxima, es decir, está por encima de la
Constitución ya que según el artículo 56.3 es inviolable e
irresponsable.
Alumno: ¿Y eso qué significa?
Maestro: Que no declara a la Hacienda Pública ni se le puede
juzgar si cometiera un delito. Tampoco se puede hablar mal de
él.
Alumno: ¿Qué diferencia hay entre democracia y República?
Maestro: Hoy día, ninguna.
Alumno: ¿Cuál es la principal característica de una
República?
Maestro: Que el cargo de Jefe o Jefa de Estado debe ser
votado cada cierto tiempo preestablecido.
Alumno: ¿El Rey es el Jefe de Estado?
Maestro: Sí.
Alumno: ¿Podemos votar al rey?
Maestro: No. El cargo es hereditario. Se pasa de padre a
hijo.
Alumno: A mí no me importa, el rey parece buena gente.
Además Felipe y Leticia por la tele son muy simpáticos.
Maestro: No importa si son buena gente o no, simpáticos o
no. La Jefatura del Estado no puede ser ni hereditaria ni un
negocio familiar. El rey ha amasado una gran fortuna gracias a
que le ampara la Constitución.
Debe quedar clara una cosa, independientemente de si el rey
tiene cara de bonachón o no, la ciudadanía debe saber que al
cargo de Jefatura de Estado tiene que poder acceder, por
sufragio universal, cualquier ciudadana y ciudadano del Estado
Español. Esa es una de las bases de una República y una
verdadera Democracia.
En
una República la ciudadanía elige por sufragio, cada cuatro,
seis u otro período a su Jefe/a de Estado.
Alumno: Pero en España se puede votar a Zapatero o a Rajoy,
¿no?
Maestro: Sí, pero estos se presentaban a la candidatura de
Primer Ministro. En España tenemos la fea costumbre de llamar
Presidente a quien no lo es. Además, vivimos en una opereta
bipartidista donde da lo mismo votar a uno que a otro. Al final
los dictados de Europa hay que acatarlos esté quien esté.
Alumno: Pero el rey es el salva patria, gracias a él vivimos
en paz sin guerras civiles ni revueltas; podemos votar al Primer
Ministro como tú dices, se puede opinar libremente, tenemos
Constitución.
Maestro: ¡Qué equivocado estás! ¡Cuánto daño hace la
dictadura de la televisión!
Vamos
a ir por partes, la Transición fue una estafa para el pueblo
español. En primer lugar España siempre ha estado sujeta a
intereses de países imperialistas como Estados Unidos,
Inglaterra o Alemania. En primer lugar, España es un lugar muy
estratégico para implantar bases militares con fines
imperialistas y tácticas de guerra económica en el mundo. Era
necesario que España ingresara en la OTAN. Para que esto fuese
posible España no podía seguir siendo una dictadura,
¿comprendes? Una vez eliminado Carrero Blanco, se procede a
entablar conversaciones con Juan Carlos, candidato idóneo para
frenar todo intento de una República de corte socialista o
comunista. Se crea un partido de derechas con el franquista
Adolfo Suárez y se legaliza el PCE cuya misión será ir
explicando al pueblo español las bondades de la Constitución del
78 (un copia pega de otras Constituciones). El pueblo, pese a no
leerse la Constitución ni conocer el alcance del artículo 56.3
vota por sufragio la Carta Magna deseando salir de una vez por
todas de la dictadura y temiendo los ruidos de sables.
Después llegará el ingreso a la Unión Europea con el cierre de
fábricas y astilleros, la venta de productos estadounidenses a
Europa a través de España, la tercerización de nuestra economía,
ya que si Alemania tenía la industria, a nosotros nos tocaba el
papel del turismo y la agricultura. También llegó la
especulación inmobiliaria, la corrupción, etc.
Alumno: Entonces, por lo menos se le debería haber dado la
oportunidad al pueblo español de votar República o Monarquía.
Maestro: Sí. Hay que decir que a las primeras elecciones
generales, durante la Transición, no dejaron presentarse a
ningún partido republicano. Estos partidos no fueron legalizados
ya que sus líderes estaban bien preparados y con un micrófono
por delante hubiesen dicho las cuatro verdades al pueblo.
Alumno: Sin embargo, la II
República trajo consigo guerras, revueltas, caos. Todo desembocó
en una guerra Civil fratricida.
Maestro: ¡Ay! ¡Cuánto daño está
haciendo la educación en nuestro país!
Alumno: Eso es lo que aprendí el curso pasado en cuarto de
E.S.O. Además la maestra de Religión dice que hay que olvidar y
mirar hacia el futuro.
Maestro: Olvidar no se puede olvidar. Hay que volver a
escribir la Historia y realizar nuevas investigaciones ya que la
Guerra Civil fue un acto de crímenes contra la humanidad, contra
el pueblo español ejercido por la oligarquía del país similar a
lo que hicieron los nazis contra los judíos, Estados Unidos
contra Irak, o Israel contra Palestina.
Vamos
a ir otra vez por partes. En primer lugar la II República llegó
con paz. Más del noventa por ciento del pueblo español la votó.
Con ella la mujer votó por primera vez, se crean miles de
escuelas públicas, se hace una verdadera Constitución, la de
1.931, se vota al Jefe del Estado, se aplica el principio del
laicismo, se forja en ella una verdadera generación de
intelectuales, se realiza una reforma agraria, se aplica el
Federalismo, se renuncia a la guerra como instrumento de
codicias imperialistas, etc. Esto, como podrás comprender, no
hace ninguna gracia a la oligarquía española, que no quiere
perder su poder. A la oligarquía de Estados Unidos e Inglaterra
tampoco le hace gracia perder sus negocios con la oligarquía
española. Así pues, los militares dirigidos por los asesinos
Franco, Mola y Queipo de Llano con la ayuda de Hitler,
Mussolini, la Iglesia, la oligarquía española y la Texaco y con
Inglaterra mirando hacia otro lado (que prefería a Franco antes
que el Comunismo) inician un golpe de Estado y ejercen un
genocidio hacia el pueblo español, crímenes contra la humanidad.
No existe pues, tal guerra de hermanos contra hermanos. Pero la
Historia siempre la escriben los vencedores.
Existe un intento malicioso de identificar en nuestro país
República con caos y guerra, pero esto no es así. ¿Vive la
República de Francia acaso en el caos?
Alumno: Pero Sarcozy es de derechas. La República es de
izquierdas, ¿no?
Maestro: La República no es patrimonio ni dela izquierda ni
de la derecha. En una República hay partidos de izquierdas y
partidos conservadores. La ciudanía elige libremente a su Jefe/a
de Estado.
En
España tendremos la República que el pueblo decida tener. La
República es del pueblo: de izquierdas, de centro, de derechas;
albañiles, conductoras de autobús, cajeros de supermercado,
empresarias, poetas, filósofos, artistas de cine, asalariados,
autónomos; con partido, sin partido; espirituales,
materialistas; masones, comunistas, socialistas, capitalistas,
bipartidistas; federales, confederales; creyentes, ateos,
agnósticos; del Madrid o del Barcelona. Todos y todas deben
sentirse a gusto y cómodos/as en la III República.
Alumno: ¿La República es sólo poder votar al Jefe/a de
Estado?
Maestro: Los que queremos una República en España
pretendemos mucho más. Sustituir las comunidades autónomas por
territorios federales…
Alumno: ¿Estados Unidos es una República Federal?
Maestro: Sí, con cincuenta Estados independientes pero
centralizados a la vez en Washington. La II República se
componía de territorios federales con capitalidad en Madrid.
Prosiguiendo con el tema, en una República el poder debe emanar
del pueblo. La Constitución la tiene que elaborar la ciudadanía
organizada en asambleas. Los ciudadanos/as deben poder tomar
decisiones, tener opiniones que sean vinculantes. Es decir, en
una República el pueblo puede participar en la elaboración de
leyes, votarlas (para eso tenemos internet), recoger firmas
vinculantes para poder expulsar y llevar a juicio al político o
juez corrupto que no hace bien su trabajo o que roba a los
ciudadanos/as. Los representantes acatan lo que decide el
pueblo. República significa acabar con la dictadura de los
medios de comunicación, dejar de ser una colonia de los Estados
Unidos, dejar de ser un mero títere en la Unión Europea, dejar
de apoyar guerras con fines imperialistas, abandonar la
explotación a Latino América y renunciar a apropiarnos de sus
recursos naturales y entrar en una política de fraternidad y
verdadera cooperación.
República es Derechos Humanos, Libertad, Igualdad y Fraternidad.
|