La Audiencia Nacional multa con 6.840 euros al alcalde de Puerto Real
EFE
2 de Junio de 2009
José Antonio Barroso ha dicho que sólo "interpreto
lo que leo y no aplaudo gratuitamente" a la Corona
El Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia
Nacional, presidido por el magistrado José María
Vázquez Honrubia, ha condenado al alcalde de
Izquierda Unida en Puerto Real (Cádiz), José Antonio
Barroso, a pagar una multa de 6.840 euros por un
delito grave de injurias al rey después de que en
abril de 2008 se refiriese al monarca con los
calificativos de "corrupto" e "hijo de un crápula",
entre otros. La Fiscalía de la Audiencia Nacional
solicitaba por el mismo delito una multa de 10.800
euros.
El magistrado adelantó hoy tras el juicio su
decisión 'in voce' en la que consideró que
"efectivamente el acusado se ha excedido y mucho en
su crítica política". "Considero que ha violado los
tres parámetros que distinguen la crítica del
insulto: la privacidad, le llama 'hijo de la
crápula', insulta a su padre y a su esposa y cae en
el insulto personal cuando no era necesario para
expresar ideas políticas", explicó Vázquez Honrubia.
"El Código Penal establece dentro de los delitos
contra la Corona que el rey representa el Estado
constitucional, y usted está insultando a esa figura
fundamental para el mantenimiento de la democracia",
zanjó el magistrado. Durante su declaración, el
alcalde se ratificó en sus palabras, pero negó su
intención de ofender al "ciudadano Juan Carlos"
porque, según dijo, en su condición de "republicano
y comunista no cabe la injuria".
"Cuantos años tiene usted", comenzó preguntándole el
juez a Barroso. "57 años cumplidos el pasado 14 de
abril" -dia en el que se proclamó la Segunda
República en 1931-, contestó el alcalde. "¡Vaya!,
que día más apropiado", replicó el magistrado
provocando las primeras risas del numeroso público
presente en la sala. De este modo, comenzó el
testimonio del acusado, primer edil de la localidad
gaditada desde 1979 hasta hoy, excepto entre 1991 y
1995.
"Me ratifico en mis críticas", aseguró Barroso, si
bien matizó en todo momento que sus palabras se
englobaron en "un contexto político". "La injuria
está fuera de mi práctica política en contra de lo
que es común en esta democracia de filibusteros",
reiteró, al tiempo que detalló que sus acusaciones
iban dirigidas contra el concepto de dinastía y en
concreto la borbónica.
Medios cortesanos
El alcalde, quien mostró dificultades de audición
reconociéndose como un "sordo de astillero", criticó
a los medios de comunicación a los que tachó de
"cortesanos" por "edulcorar la figura del rey".
En ese sentido, explicó que, de la media hora que
duró su discurso en un acto de conmemoración del
septuagésimo séptimo aniversario de la II República
que se celebró en la Casa de la Cultura de la
localidad gaditana de Los Barrios, apenas hablo de
Don Juan Carlos "unos tres minutos".
"Me ratifico en mis críticas", aseguró Barroso
"Sería bueno que todos en este país leyeran sobre la
figura de los borbones", defendió Barroso, quien
añadió que todo lo que dijo "está publicado en
libros". "Pensaba que era conocido por todos",
sentenció.
El juicio continuó precisamente con la audición de
las expresiones que vertió el acusado en aquel acto.
Si bien las risas habían estado presentes en varias
fases de la declaración de Barroso ante el juez, la
sala guardó silencio mientras se escuchaba parte del
discurso del alcalde en el que, entre otras cosas,
criticó la "condición deleznable" de Don Juan Carlos
y de su padre, el conde Don Juan, al que calificó de
"una persona de condición licencosa, deplorable,
deleznable, no menos licenciosa que la de su
esposa".
También aludió a la "acostumbrada vinculación
etílica" del rey y defendió que, "si algo había que
aplicarle, sería la Ley de Extranjería".
"Sería bueno que todos en este país leyeran sobre la
figura de los borbones"
"El Borbón forma parte de la parte más oprobiosa de
la Historia de este país, es algo de lo que nos
debemos avergonzar, y al Borbón aunque no le
colguemos de los intestinos de los obispos lo
tendremos que echar, más temprano que tarde, de
forma democrática", aseveraba también en otra parte
de su discurso el alcalde, quien hoy volvió a
escuchar sus palabras ante el tribunal en una sala
de juicios presidida precisamente por una fotografía
del rey.
Contra la impunidad de la injurias
Por estos hechos el fiscal Pedro Rubira elevó a
definitiva su petición de 10.800 euros de multa
alegando que, "lo que se está juzgando no es la
legitimidad de la República o la Monarquía, sino que
realizó que unas manifestaciones injuriosas y que
eran un exceso a la libertad de expresión". "El
debate es si las expresiones fueron necesarias o
ultrajantes y ofensivas", insistió el fiscal, quien
hizo hincapié en alertar de que si hoy no se
condenaba a este acusado "este tipo delitos contra
el rey quedarán impunes".
El juez central de Lo Penal, José María Vázquez
Honrubia, ya ha juzgado en los últimos meses otros
casos por injurias al rey como la quema de
fotografías del monarca en Girona o la portada
satírica de 'El jueves' que ridiculizaba al Príncipe
de Asturias.
En ambos casos, impuso a los autores de las injurias
multas de 2.730 y 3.000 euros, respectivamente.
No obstante, el último proceso por un hecho similar
sentó en el banquillo el pasado diciembre a dos
dibujantes del diario 'Deia' y a un articulista,
quienes fueron finalmente absueltos por el mismo
tribunal del delito de inujurias al rey por el que
habían sido acusados al burlarse del monarca con
motivo de la caza del oso Mitrofan.
En contra de la postura del fiscal, el abogado de la
defensa de Barroso, el dirigente de IU Enrique
Santiago, basó su defensa en "la prevalencia del
derecho a la libertad de expresión". "Las
declaraciones no han supuesto ningún tipo de ofensa
ni agresión para el jefe del Estado", alegó, al
tiempo que insistió en que "las críticas no iban
contra el actual jefe del Estado, sino contra la
dinastía borbónica y eso no se puede censurar".
Ya en su turno de última palabra, Barroso, quien hoy
estuvo arropado por el coordinador general de su
partido, Cayo Lara, o destacados líderes comunistas
como Francisco Frutos o Felipe Alcaraz, cerró la
vista reiterando su inocencia. "Yo no soy un lerdo,
ni un lacayo, ni un cortesano, sé lo que digo, soy
libre porque no me someto a obligaciones dinásticas
ni aplaudo a nadie.
Más pronto que tarde, los pueblos de España
conocerán todo y lo juzgarán", dijo. El juez hará
pública su sentencia completa en los próximos días y
la defensa del condenado ya anunció que la
recurrirá.
Las frases de Barroso
"Al Borbón, si algo había que aplicarle, sería la
Ley de Extranjería, y no a ningún emigrante que
viene a construir este país".
Al rey, "aunque no le colguemos con los intestinos
de los obispos, lo tendremos que echar, más temprano
que tarde, de forma democrática".
"Ni soy un lerdo, ni un lacayo, ni un cortesano
(...). Interpreto lo que leo y no aplaudo
gratuitamente" al rey.EFE